Viejita de 100 años bebe vino semanalmente Nobsa

El vino dulce y la cerveza son la fórmula para una larga vida, según afirma Lorenza Albarracín viuda de Pérez, una mujer boyacense que cumplió cien años el 31 de diciembre.
Lorenza nació el último día de 1909 y aunque sufrió bastante para poder sacar adelante a sus hijos, hoy, con cien años, goza de buena salud, come de todo y se toma semanalmente una botella de vino dulce. Además, le gusta tomar cerveza.
“Me tocaba madrugar a la 1:00 de la mañana y salir cargada con unos maletones de Corrales a Sogamoso, en un viaje que duraba tres o cuatro horas”, recuerda Lorenza.
Allí compraba trigo, cebada y otros granos y los vendía en las plazas de mercado de Sogamoso, Duitama y otras poblaciones boyacenses.
Dice que conoció las monedas de centavo y de dos centavos y que en esa época la plata sí tenía valor.
“Con un centavo se compraban dos mogollas grandes, una panela de Charalá (Santander) y otras cositas para preparar la comida”, cuenta.
En 1949 conoció el tren, cuando Acerías Paz del Río construyó el ferrocarril entre Belencito (Nobsa) y las minas de hierro del municipio de Paz de Río.
“En 1949 conocí al presidente Mariano Ospina Pérez cuando inauguró la estación del tren en Corrales”, señala.
Lorenza, todavía sale a la plaza de mercado a comprar frutas, que no le pueden faltar en su dieta.
Vive asombrada de las costumbres modernas, especialmente de que la gente ya no se casa. Y vive muy agradecida con el médico Rafael Armando Pulido, quien desde hace 20 años la atiende.
De lo único que se queja es de las cataratas que le han reducido considerablemente la visión, pero aun así mantiene una vida normal para su edad